JaviHugoEloy: Avantasia - The Scarecrow

Banda: Avantasia

Disco: The Scarecrow
Año: 2008
Estilo: Power Metal/Hard Rock
País: Alemania
Discográfica: Nuclear Blast

Tracklist:

"Twisted Mind" – 6:12
"The Scarecrow" – 11:14
"Shelter from the Rain" – 6:11
"Carry me Over" - 3:54
"What Kind Of Love" - 4:58
"Another Angel Down" - 5:43
"The Toy Master" – 6:22
"Devil in the Belfry" – 4:41
"Cry Just a Little" – 5:14
"I Don't Believe in Your Love" – 5:32
"Lost in Space" – 3:52

Video de Lost In Space

Sin duda, Tobias Sammet sabe muy bien como moverse en este mundillo, en todos los sentidos. Y es que la expectación generada para este lanzamiento ha sido máxima. Tras dos auténticas obras de arte bajo el acertado nombre de “The Metal Opera” pt.I y pt.II, el carismático lider de EDGUY vuelve a ser actualidad con un tercer disco de sus AVANTASIA, bajo el título de “The Scarecrow” y dando un evidente paso hacia adelante en su estilo musical.

Gran parte de la expectación que ha girado en torno a este disco se ha debido a los rumores y conjeturas sobre si finalmente iba a ver la luz un nuevo disco de Avantasia. Finalmente Tobias Sammet parece que encontró el tiempo necesario para este nuevo disco y desmentir sus propios rumores que apuntaban a que el proyecto no seguiría adelante. Estrategia de marketing o realidad, el caso es que hoy tenemos en nuestras manos este “The Scarecrow” (tras el lanzamiento de los dos EP previos “Lost In Space Pt.I” y “Lost In Space Pt.II”), un disco que, sin duda alguna, continuará dando que hablar.

Una de las características conocidas de las “Operas Metal” de Avantasia es la colaboración de los mejores músicos del estilo que Tobias conseguía reunir: junto con sus amigos Henjo Richter (Gamma Ray) a la guitarra, Markus Grosskopf (Helloween) al bajo y Alex Holzwarth (Rhapsody of Fire) a la batería, muchos otros nombres conocidos aportaron su granito de arena, como Michael Kiske (ex Helloween), David DeFeis (Virgin Steele), André Matos (ex Angra), Sharon den Adel (Within Temptation), Timo Tolkki (Stratovarius), Kai Hansen (Gamma Ray), Sascha Paeth (Heaven's Gate) o Eric Singer (Kiss) – da vértigo nombrar a tantos músicos consagrados -, para crear una auténtica ópera de indudable calidad. Para esta ocasión, la cosa no podía empeorar, y se ha rodeado de otra vez de grandes compañeros: Sascha Paeth (Heaven’s Gate) a la guitarra y Eric Singer (Kiss) a la batería repiten con Tobias Sammet, esta vez también al bajo y con nuevas colaboraciones, de lo mejorcito del panorama actual: Roy Khan (Kamelot), Jorn Lande (ex Masterplan, Ark, Yngwie Malmsteen, ....), Michael Kiske (ex Helloween), Bob Catley (Magnum), Henjo Richter (Gamma Ray), Kai Hansen (Gamma Ray), Amanda Somerville, Alice Cooper, Oliver Hartmann (Impelliteri) y Rudolph Schenker (Scorpions). De nuevo, los ingredientes para el éxito están encima de la mesa.

Pues bien, lo primero que notaremos al oir el disco es un ligero cambio en el sonido y en las composiciones, adentrándose más en el Hard Rock, aunque sin dejar de lado el Power Metal más épico. Después de los dos anteriores discos que se consagraron junto con los grandes discos del estilo, Tibias parece que, sin olvidarse de ello, mira hacia adelante y con los años, no se estanca. Tampoco se puede decir que de carpetazo al Power más clásico de los noventa, ni mucho menos, puesto que seguirá siendo muy importante el el sonido de Avantasia. Y echando otra vista a los nombres de los colaboradores, veremos claro este giro hacia el Rock, donde una de las piezas que más importancia cobrará será la de la voz del genial Jorn Lande.

Metámonos ya en los temas. Merecen la pena cuanto menos, nombrarlos uno a uno puesto que, aunque el disco discurre con conocida homogeneidad, cada uno tiene algún elemento característico. Arrancamos con “Twisted Mind”, con riffs contundentes y con aires arábigos que crean el ambiente adecuado para que Roy Khan despliegue todo su poderío al inicio del tema. La presencia de Sascha Paeth a la voz y la guitarra es más que evidente, dando su conocido toque personal y conjuntando un tema muy dinámico y siendo ya este el que nos muestra la diferencia de sonido respecto a los dos primeros discos. Como vemos, Tobias no esconde nada el sonido más Hard en detrimetno del Power (solo en cierta medida, no esperemos un cambio radical).

El siguiente es el tema que da nombre al disco y vendría a ser algo así como el “The Seven Angels” del anterior, un tema largo, de más de 11 minutos y con varias partes componentes. Geniales las aportaciones vocales de Jorn Lande que, junto con las voces de Sasha y el propio Tobias general un tema lleno de matices y colores diferentes, a demás de los toques folk que varías con las partes más épicas, los riffs más agresivos, los momentos más melódicos y los pomposos estribillos. Mención especial merece el solo de guitarra “in crescendo” de Sascha. No cuesta absolutamente nada digerir los once minutos de duración, una característica que ya conocíamos de las composiciones del genial Sammet.

“Shelter From the Rain” abandona el nuevo toque sonoro y nos lleva de regreso al Power de las anteriores grabaciones. No obstante, es el tema en el que aparece de nuevo la participación de Michael Kiske con su carismática voz (y volviendo a su actualmente odiado estilo) y tanto Kai Hansen como Henjo Richter se unen a Sascha para elaborar un tema cien por cien dentro de los cánones del Power Metal. Estribillos coreados, solos e interludios vocales no pueden faltar en un corte de este estilo. Efectivo, sin duda.

De nuevo volvemos al nuevo sonido y bajamos el ritmo con “Carry Me Over”. Un tema relativamente sencillo, rítmico y suave, para nada metálico. El estribillo es su mayor baza, careciendo incluso de solo de guitarra o de colaboraciones. No es de lo mejor del disco, pero cumple, sobre todo, abriendo las puertas para la balada siguiente, “What Kind of Love”. La voz de Amanda Somerville a duo con la de Tobias se mezcla con las melodías suaves y ambientales y con la participación de nuevo de Kiske para conseguir que nos dejemos llevar y disfrutar cerrando los ojos.

Volvemos a la carga con “Another Angel Down”. Se acerca más al Heavy Metal de los ochenta que al Power, con la lujosa voz de Jorn Lande como aliciente y el solo final de Henjo Richter. Pegadizo, efectivo, rítmico (la batería se muestra muy contundente) y lleno de originalidad. A estas alturas, ya nos damos cuenta de que Lande acapara casi la mitad del protagonismo vocal junto con el propio Sammet, relegando a Kiske a una tercera posición. “The Toy Master” es el tema más extraño del disco. Contando con la participación de Alice Cooper, parece como si Tobias hubiera que tenido que adaptar un tema ya compuesto al estilo del inimitable Alice. Los tintes ligeramente oscuros se mezclan con el Rock-Metal más clásico consiguen crear un conjunto totalmente pegadizo.

“Devil in the Belfry” vuelve a los dos primeros discos de Avantasia, más metalero que hardrockero, aunque con el (una vez más) genial aporte de Jorn Lande. Estribillos pegadizos “made in Sammet”, riffs y puntéos de guitarra suculentos y contando con la batería de Eric Singer en un enfoque distinto al que nos suele tener acostumbrados. Llegando a parte final del disco, volvemos a desacelerar con “Cry Just a Little”, una balada con corte bastante clásico, que cuenta con la colaboración de Bob Catley, consiguiendo narrar casi más que cantar, y añadiendo buenas dosis de magia y ternura. Eléctrico final con el solo de guitarra, elevándose respecto al sonido acústico del tema en general y consiguiendo poner los pelos de punta.

La recta final nos llega con el tema “I Don't Believe in Your Love”, volviendo a los tintes melódicos y hardrockeros y contando en este caso con la guitarra de Rudolph Schenker y el aporte vocal de Oliver Hartmann. Desenfadada y directa. Y para cerra, “Lost In Space”, tema conocido del doble single hace unas semanas ya lanzado. Desde luego que como single no tenía precio: sencillo, directo y con cierto toque casi pop. Vamos, que bastante comercial. Cercano a lo que fue el “Superheroes” del último disco de EDGUY y que, sin ser descriptivo sobre el disco en sí, cierra el mismo de manera efectiva, aunque sin ningún alarde de nada.

Una vez escuchado el disco un par de veces, no quedamos con una buena sensación, como no podía ser de otro modo. Acertado el ligero rumbo hard-rockero que se ha querido imprimir a AVANTASIA, aunque esto lo aleja un poco de los dos primeros y apoteósicos discos. Cuesta diregirlo al principio precisamente por eso, pero la calidad compositiva de Tobias parece no tener límite, y es casi imposible escucharle hacer u mal tema. Además, para este año contaremos con la oportunidad de ver por primera vez a AVANTASIA en directo, puesto que están confirmados, de momento, para el Wacken de este año (ya veremos con qué formación). Todo un efectivo paso hacia delante en la carrera del pequeño Tobias... del cual ya se ha anunciado una segunda parte para el año próximo.

Músicos: